Nada, nada, nada, nada.
Ya lo decía la canción de Los Piratas – «Promesas que no valen nada»
Alguien nos dice:
«Te quiero, pero no puedo estar contigo».
¿Puede alguien, por favor, explicarme qué significa eso?
Es un claro ejemplo de palabras que no dicen nada, que no valen nada.
Si quieres a alguien te buscas la vida para estar con esa persona, como sea.
Lo has hecho tú que estás leyendo esto y lo he hecho yo, cuando me ha tocado.
Porque todos amamos igual, en ese sentido, amar es amar.
Pero escuchamos u oímos, lo que queremos escuchar u oír.
Nos quedamos con la «parte que nos interesa».
Nos engañamos, a fin de cuentas.
Si alguien te dice eso: «Te quiero, pero no puedo estar contigo».
Amigo, amiga: «¡Te han dado la patada!».
Y por mucho que tú quieras que esa persona te quiera, ahí tienes ese «pero» que en el fondo es una negación de lo anterior.
Si alguien te quiere, va a estar contigo, no lo dudes ni un segundo.
No hay «peros» que valgan, sólo son excusas y justificaciones.
Así que, siento en el alma ser yo quien te lo diga, pero esa persona, no te quiere.
Tal vez, pienses, bueno, hay muchos motivos por los que puedes querer a alguien y no estar con esa persona…
Si a ti «te vale», nada que decir.
Pero, sinceramente, cuando tú realmente quieres a otra persona, ¿quieres estar con ella?
Más aún, ¿de qué te sirve que alguien «te quiera tanto» si no quiere estar contigo?
Si, es verdad, tal vez, «alimente tu autoestima» o «tu ego», en cierto modo, sin embargo, el resultado no cambia: ¿por qué entonces estás tan triste, dolido/a y «descorazonado/a»?
Otros ejemplos de «palabras que no valen nada«:
«No eres tú, soy yo».
«No sabes la envidia que me da el hombre/la mujer que se case contigo».
«Yo me casaría contigo, pero…».
«Ojalá te hubiera conocido antes».
«Ahora necesito estar solo/a».
«Ahora necesito centrarme en mi carrera».
«No estoy preparado/a para tener una relación de pareja».
«Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, pero…».
Me encanta este vídeo del principio de la película: ¿Qué les pasa a los hombres?
Lo deja más claro que el agua.
Yo no lo hubiera podido explicar mejor.
Ya os volveré a hacer referencia a esta película porque estoy preparando una entrada sobre el libro que la inspiró 😉