¡Las que saben pedir Ayuda!
Suelo decir, que incluso «Superman» tiene su «criptonita».
Todos, en un momento u otro, nos encontramos con «algo» en nuestras vidas que no sabemos manejar, que no sabemos resolver. Algo con lo que no sabemos qué hacer, pero que sabemos, sin ningún género de dudas, que nos está complicando la vida, y que tal vez lleve demasiado tiempo haciéndolo.
Es posible que lleves tiempo lidiando con algo que no se resuelve.
Le has dedicado mucho tiempo y esfuerzo, has consultado, has leído, has reflexionado, y probablemente, le hayas también dado alguna vuelta que otra, por no decir que lo has hecho sin descanso, y nada…
Pedir ayuda es signo de fortaleza porque significa reconocer que no lo sabes todo.
No saberlo todo, en contra de lo que podemos pensar e incluso en contra de lo que nos han podido enseñar, lo único que nos demuestra es que no somos Dios.
No somos débiles, ni torpes, ni vagos, ni idiotas, ni frágiles, ni estúpidos.
¡Ni mucho menos!
Si eres una persona, como lo somos todas las demás, que tiene limitaciones, tengo una buena noticia para ti.
¡Estás en el camino de conseguir ser la persona que quieres ser!
Porque sólo reconociendo nuestras limitaciones y nuestras áreas de mejora, conseguiremos llegar a donde siempre hemos querido llegar, ser quien siempre hemos querido ser, y como todo ser humano, conseguir ser feliz.
¡Pide ayuda ahora!
Una vez que lo hagas, como escucho cada día, lo que te preguntarás será:
¿Por qué no lo he hecho antes?